LA SITUACIÓN
General Atomics necesitaba mover sus imanes superconductores por su espacio de fabricación. Las instalaciones están equipadas con una grúa de 35 toneladas, pero cada imán y su estructura de soporte pesan más de 200 toneladas. Para complicar aún más las cosas, los imanes, muy sensibles, deben mantenerse nivelados con una precisión de 0,01 pulgadas para no someterlos a tensiones indebidas.